Bamako, la "plus africaine de toutes les capitales", ainsi est communément connue notre aimée Bamako, et bien que nous ne saurions pas exactement dire à quoi cette affirmation se rapporte nous devinons qu'ils ont quelque chose à voir avec le tumulte que l’on respire dans ses rues depuis que le soleil se lève et jusqu'à ce qu'il se couche, le coloris de ses marchés, l'essaim de cultures et de traditions qui vivent ensemble dans l’harmonie, mais aussi la croissance incontrôlée, les infrastructures déficientes à cause de cette même croissance incontrôlée, le trafic impossible (…).
Et voilà que marcher dans les rues de Bamako peut parfois se révéler une tâche difficile, entre les Jakarta*, les trottoirs qui apparaissent et disparaissent, des canaux ouverts pour la canalisation d'eaux de pluies et plus encore. Cependant, nous pouvons rencontrer de temps en temps, ces havres de paix que sont le potagers urbains et qui sont éparpillés dans les différentes communes de la capitale. Ces potagers qui aident à approvisionner la demande d’aliments de la capitale, représente aussi le milieu de vie de beaucoup de familles victimes de l'exode rural. Parmi ceux-ci nous pouvons trouver une grande variété de cultures locales. Les champs de mangues, avec ses arbres infinis méritent d’être mentionnés tout particulièrement.
L'avenir de ces parcelles dépendra principalement de la gestion de la propriété de la terre et de l'accès à l'eau.
martes, 24 de abril de 2012
lunes, 23 de abril de 2012
TORO SI TÉ
El pasado jueves llegaba a Dakar procedente de Bamako, Amadou Toumani Touré, popularmente conocido como ATT. Su Llegada al aeropuerto Leopold Sedar Senghor acompañando de toda su familia, coincidía con la puesta en libertad de miembros del antiguo gobierno democráticamente elegido que habían sido arrestados en sus domicilios a principios de semana (…).
Esta mañana después de hablar con un amigo de Bamako me he acordado del documental “Toro si té”, que aprovecho para recomendaros, y que narra la experiencia de un médico en una zona rural del sureste de Mali. Siempre que éste pregunta a sus pacientes ika kéné? (¿qué tal?) éstos responden indistintamente toro si té, que quiere decir todo va bien, aunque tengan la cabeza abierta o la pierna rota…pues eso…que “toro si té”.
Esta mañana después de hablar con un amigo de Bamako me he acordado del documental “Toro si té”, que aprovecho para recomendaros, y que narra la experiencia de un médico en una zona rural del sureste de Mali. Siempre que éste pregunta a sus pacientes ika kéné? (¿qué tal?) éstos responden indistintamente toro si té, que quiere decir todo va bien, aunque tengan la cabeza abierta o la pierna rota…pues eso…que “toro si té”.
domingo, 8 de abril de 2012
REHABILITACIÓN DEL PARQUE ZOOLÓGICO DE BAMAKO
Recién pisado suelo senegalés, hacemos balance de proyectos que hemos desarrollado y de otros que siguen en marcha y que esperamos retomar pronto, una vez todo vuelva a la calma en nuestro querido Mali.
Tenemos la suerte de participar en el proyecto de rehabilitación del nuevo parque zoológico nacional de Bamako, proyecto financiado por la fundación Aga Khan (AKTC), nuestra misión en principio es la de ilustrar las distintas especies animales, para su posterior utilización en paneles e imagen del parque zoológico
Aquí dejamos una pequeña muestra de algunas ilustraciones ya acabadas, el proyecto aún sigue abierto y su inauguración prevista para este 2012.
sábado, 7 de abril de 2012
1 DE ABRIL
cafetería le relax, en su
primer día sin toque de queda
Después de casi una semana sin salir de casa, se comprenderá nuestra tendencia callejera de los últimos días, en los que apenas hemos permanecido entre cuatro paredes. Todo el día de un lado a otro, recorriendo la ciudad, visitando a los amiguetes y parando en los maquis de rigor para echar esa cervecita fresca que se disfruta ahora como nunca.
En la esquina el mismo puesto de siempre que sirve café soluble con leche condensada y bocatas de tortilla o de mayonesa.
Más tarde en el mercado el mismo bullicio de siempre y el mismo tráfico imposible en las calles.
Ya es mediodía y nos acercamos al maqui que hay detrás de casa a tomar una cerveza. Los maquis vienen a ser como nuestras tabernas de toda la vida, esos lugares entrañables en los que todo el mundo opina, en los que todos los clientes acaban enfrascados en una misma conversación mientras toma una Falg, una Castel o un refresco de Gengibre, y en los que se siente la vida un poco más liviana.
Taras que vuelve a introducir el ritmo cubano en la noche bamakoise (…), todo normal…mejor dicho “normal”, puesto que ahora todo está impregnado de miedo, preocupación, tristeza y en el mejor de los casos de inconsciencia.
Hoy es uno de abril, han pasado ya once días del golpe de estado y el pueblo de Mali (...) bueno, hablaré de lo que conozco de primera mano, la gente de Bamako resulta tan afable como siempre, a juzgar por su forma de actuar nadie diría lo que aquí ha pasado y lo que ahora está en juego. Hace falta prestar algo más de atención para darse cuenta de que la gente se esfuerza por conseguir esa normalidad de la que antes hablaba, esa normalidad que es la que hace posible generar ingresos a la familia. Por encima de otras cuestiones prima la supervivencia.
Resulta difícil entender lo que aquí está ocurriendo, este revés al país, el tiempo nos dirá a quién beneficia esta sinrazón, si es que beneficia a alguien.
De momento quedan en el aire las ilusiones de miles de personas que luchan día a día por sacar cabeza.
vista del puente viejo desde el canoe club
tras el golpe de estado, demasiada calma
primer día sin toque de queda
Después de casi una semana sin salir de casa, se comprenderá nuestra tendencia callejera de los últimos días, en los que apenas hemos permanecido entre cuatro paredes. Todo el día de un lado a otro, recorriendo la ciudad, visitando a los amiguetes y parando en los maquis de rigor para echar esa cervecita fresca que se disfruta ahora como nunca.
En la esquina el mismo puesto de siempre que sirve café soluble con leche condensada y bocatas de tortilla o de mayonesa.
Más tarde en el mercado el mismo bullicio de siempre y el mismo tráfico imposible en las calles.
Ya es mediodía y nos acercamos al maqui que hay detrás de casa a tomar una cerveza. Los maquis vienen a ser como nuestras tabernas de toda la vida, esos lugares entrañables en los que todo el mundo opina, en los que todos los clientes acaban enfrascados en una misma conversación mientras toma una Falg, una Castel o un refresco de Gengibre, y en los que se siente la vida un poco más liviana.
Taras que vuelve a introducir el ritmo cubano en la noche bamakoise (…), todo normal…mejor dicho “normal”, puesto que ahora todo está impregnado de miedo, preocupación, tristeza y en el mejor de los casos de inconsciencia.
Hoy es uno de abril, han pasado ya once días del golpe de estado y el pueblo de Mali (...) bueno, hablaré de lo que conozco de primera mano, la gente de Bamako resulta tan afable como siempre, a juzgar por su forma de actuar nadie diría lo que aquí ha pasado y lo que ahora está en juego. Hace falta prestar algo más de atención para darse cuenta de que la gente se esfuerza por conseguir esa normalidad de la que antes hablaba, esa normalidad que es la que hace posible generar ingresos a la familia. Por encima de otras cuestiones prima la supervivencia.
Resulta difícil entender lo que aquí está ocurriendo, este revés al país, el tiempo nos dirá a quién beneficia esta sinrazón, si es que beneficia a alguien.
De momento quedan en el aire las ilusiones de miles de personas que luchan día a día por sacar cabeza.
vista del puente viejo desde el canoe club
tras el golpe de estado, demasiada calma
Suscribirse a:
Entradas (Atom)